¿Recordáis cuándo de niña los leotardos se te bajaban? Han pasado más de 35 años desde que era pequeña y las cosas, poco o nada han cambiado. Ayer fui al pediatra con Luca para la revisión de niño sano de los 6 meses.
Si no sabes de lo que hablo, quizá es porque esta terminología, revisión de niño sano, es algo propio de Andalucía. El caso es que tienes que madrugar un montón para que tu niño, aparentemente sano, no se contagie de nada de los otros niños, aparentemente enfermos, que se van acumulando a la puerta de la consulta del pediatra. ¿Pasa también esto en vuestro centro de salud?
¿Y qué tiene que ver esto del niño sano con los leotardos? Pues la verdad es que nada, pero yendo al pediatra pasé por delante de un colegio y me fijé en una niña, que rondaría los 5 años, con falda y leotardos. Yo caminaba detrás de ella y podía ver la costura de la entrepierna asomando por debajo de la falda. Todos lo que hemos llevado leotardos, sí en mi época también los niños los usaban, sabemos que eso es un asco, pica y es muy incómodo. Por si eso fuera poco, la pequeña corría arrastrada de la mano detrás de una madre con prisas, con los leotardos medio caídos. No pude evitar pensar cómo de niños nos tenemos que acomodar a los ritmos y necesidades de los que nos cuidan. Y ahora yo soy madre, se volteó la tortilla y las responsabilidades.
Ya casi llegando al centro de salud, un niño y una niña caminaban al ritmo de la abuela que los acompañaba a clase. Iban despacio, sonriendo. Y me pregunté ¿será por eso que los niños quieren tanto a sus abuelos?